Con un gol sobre la hora de Ousman Dembélé el Barcelona derrotó 1-0 al valladolid, con este agónico triunfo el equipo liderado por Lionel Messi se pone a un punto el Atlético de Madrid y dos por encima del Real Madrid su próximo rival el fin de semana en lo que será uno de los clásicos más importante para el equipo catalán en busca de salvar una temporada difícil a nivel institucional y deportivo.
Los minutos previos al partido de hoy para el Barcelona comenzaron con un homenaje a Lionel Messi por convertirse con 767 partidos en el jugador de fútbol con más partidos disputados defendiendo la camiseta del Barca, una de las pocas marcas que le faltaba añadir a su legendario palmarés como futbolista blaugrana.
Una racha de mal juego
A pesar de que Ronald Koeman alineó su mejor once para disputar el partido en innegable que el nivel del equipo no es el mejor y que más que un conjunto es un ciclon de rafagas de talento individual tratando de cada uno defenderse como pueda, atrás han quedado los gloriosos años donde el buen juego colectivo era la doctrina máxima para ganar los partidos.
Ahora al Barcelona le alcanza con jugadas ajenas al juego para sacar adelante partidos que en definitiva son los que coronan o hacen tropezar a los campeones, en ocasiones el fútbol es un deporte con multimatices que se resumen a un solo objetivo conseguir la victoria.
Un clásico donde se define la temporada
Decir que esta es la temporada más complicada para los intereses del FC Barcelona es estar en lo correcto, porque ha sido un año de recambio tanto en lo institucional como en lo deportivo, pero no fue un cambio orgánico de selección natural por el paso del tiempo sino por el destruir de la forma menos adecuada todo lo construido en casi 6 años de gestión del polémico presidente Josep Maria Bartomeu quien sumió al club en una ola de escándalos deportivos y malas decisiones financieras.
Con este panorama el partido que disputarán el FC Barcelona y el Real Madrid el próximo sábado 10 de Abril cobra una importancia vital para el equipo de la ciudad condal, dado que al quedar eliminados de la Champions League el club debe coronarse campeón en las competencias locales donde cada partido que se dispute por la liga debe ser ganado aprovechando los malos resultados obtenidos por el Atlético de Madrid.
Adicionalmente el equipo culé jugará la final de la copa del rey contra el Athletic de Bilbao el 14 de Abril por partido único, ganando la copa y consiguiendo un buen resultado en la tabla de la liga se podrá decir en el futuro que esta temporada pasó de ser la peor de los últimos años a convertirse en la base de la nueva era deportiva del FC Barcelona.
@alex-martinez